Al cumplirse el Centenario de la Diócesis San Ambrosio de Linares, agradecemos a nuestros antecesores el anuncio del Reino, y expresamos nuestro deseo de continuar despertando la conciencia misionera para poner a la Iglesia en estado permanente de misión. (DA 551)
Nuestras Orientaciones Pastorales (2024-2026), que llevan por título “Serán mis testigos”, en la orientación IV, se nos invita a ser una Iglesia en salida y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio”. Es un tiempo privilegiado de animación y vida misionera; un tiempo para renovar nuestro bautismo, un tiempo de misión permanente.
En este espíritu queremos vivir e impulsar la “Misión Diocesana permanente para “salir” e ir al hermano que está cerca y al que está lejos, al que piensa diferente, al que sufre o está solo, al que necesita ser escuchado y al que anhela una palabra de esperanza cristiana.
Queremos ser una Iglesia, una Diócesis, una Parroquia, una Comunidad en salida, que comparte y transmite la alegría de su fe con todos los hermanos.
Fundamentos bíblicos de la misión
La Evangelización obedece al mandato misionero de Jesús: «Vayan y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a observar todo lo que les he mandado» (Mt. 28,19-20)
Invocamos al Espíritu Santo, alma de la misión, que nos anime a crecer en una actitud misionera para llegar a las personas y recomenzar cada día desde la persona de Jesús. Nos unimos en este Mes Octubre Misionero a la Iglesia Universal y rezamos por los misioneros y misioneras y pedimos al Señor que sean muchos más los que anuncien el Reino de Dios. Hna. Pilar Tapia Agurto. Dir. Departamento de Misiones