
Santo Domingo, Coihueco:
Con devoción, respeto y espíritu comunitario, el sector Lagunillas, en la comuna de Chanco, honró la tradicional Cruz de Mayo, una de las expresiones más sentidas de la religiosidad popular en nuestro campo chileno. Como cada año, el párroco Francisco Hormazábal acompañó a la comunidad en la procesión y posterior quema de la cruz, vestida y adornada por los propios vecinos. Entre cantos y oraciones tradicionales, adultos mayores, huasos montados, jóvenes y niños participaron con entusiasmo, demostrando que esta tradición sigue viva en el corazón del pueblo. Al finalizar la ceremonia, se compartió una once comunitaria, agradeciendo a todos quienes colaboraron para dar vida a esta celebración llena de fe, identidad y memoria.
Fabián Martínez, corresponsal.