Con alegría y entusiasmo nos reunimos varias religiosas de distintas Congregaciones de nuestra Diócesis de Linares. Era nuestra primera reunión del año.
Después de un rico desayuno nos preparamos para una liturgia de preparación para atravesar la Puerta Santa, comenzamos en la capilla del obispado, luego nos pusimos en marcha para peregrinar hacia la Catedral, como Consagradas, somos peregrinos de esperanza. Quisimos tener un momento de encuentro vivo y personal con el Señor Jesús, atravesar la «puerta» de salvación.
En el corazón de todas anida la esperanza como deseo y expectativa del bien, aun no sabiendo que pasará mañana Que el Jubileo sea ocasión de reavivar la esperanza, «La esperanza no defrauda» (Rm 5,5).
Necesitábamos encontrarnos para organizar y ver fechas importantes y animarnos para vivir este año de centenario de nuestra Diócesis y el Jubileo de la esperanza.